¿Cómo será?

Me dolió, ¿me está doliendo ahora? no se. Estaba haciendo algo, cualquier cosa, caminando, platicando, durmiendo, tomando un café, manejando, trabajando, jugando con mi hijo, cuando de pronto sentí un dolor y ahora estoy tirado en el suelo. La fuerza me dejó, intento pararme y no puedo, sólo escucho mi respiración, estoy concentrado y utilizando toda mi fuerza restante para respirar, la escucho dentro y muy fuerte como si respirara con un snorkel. Si intento mover un sólo músculo, se me va la energía necesaria para respirar, mejor me quedo quieto y respiro, me aferro aquí.
Sólo veo el suelo, un ángulo que no veía desde hace mucho, estoy consciente, un poco, oigo en eco y lejos lo que pasa a mi alrededor, pero estoy solo ¿o no?
Veo mi mano frente de mi cara, es como si fuera la mano de alguien más, la sensación es muy extraña, muevo el dedo para asegurarme de que es la mía, pero entonces, la respiración otra vez, no puedo perder la concentración en respirar, tengo que luchar.
Todo se hace más oscuro, me estoy yendo, ¡no puede ser! ¿yo? ¿es un sueño? No, seguro que no, ya no hay regreso o ¿si? ¡no me voy a dejar morir! ¡no quiero!, estoy como encandilado, sólo son sombras, cada vez escucho más fuerte mi respiración pero más bajo todo o demás, sigo luchando me falta mucho por hacer en la vida, pero no tengo miedo, si esto tiene que ser que sea, no me arrepiento de nada.
Ya no veo nada, pero oigo, ese entrar y salir de aire en mis pulmones y ahora un latido lento y cada vez más lento. Estoy resignado, es muy fuerte.
¡No! Cerebro, ordena que el cuerpo se mueva! Tú saltabas y corrías, fuiste el más rápido y lo hacías sin ningún esfuerzo, lo único que tienes que hacer es focalizarte, pero ahora, la respiración otra vez, es como arena movediza, si quiero salir, más me hundo. Sólo puedo esforzarme por lo más básico.
Mi esposa, te amo.
Ya no siento, estoy dentro de mi. Me estoy perdiendo. ¿quién soy?
Respira, respira...
Nada. Ya no soy.
Negro, no siento, no pienso, no oigo, no respiro. ¿qué soy?
Mi cerebro ya no está vivo, ¿qué es un cerebro?
Ahora soy energía pura, una luz, soy parte de un todo igual que yo, inmerso en él pero aparte, no soy el único, hay algunas luces cerca de mí. ¿Mis abuelos? ¿Mi tío? Pero todo lo que sabía ya no lo se, todo murió, yo ya no soy yo y mis difuntos, ¿quiénes son? Ahora percibo las cosas de manera distinta, no tengo sentidos, todo murió. ¿murió?
Cuando muriera esperaba encontrarlos pero ¿porqué razón ridícula creí que iba a ser como caminar en las nubes y ver los mismos colores y oler a lavanda y ver a mi abuelo y sentir su abrazo?
En realidad no estoy pensando esto, yo ya no pienso. Todo es distinto.
Sólo algunas luces son más cálidas y reconfortan, reconfortan de una manera jamás experimentada, no hay sentimientos es sólo distinto, pero me gusta estar cerca de ellas, nos unimos, ahora soy parte de una luz mayor, ya no soy individual, nos vamos juntando y cada vez somos más parte del todo infinito.
Esto es lo que he sido siempre, es mi naturaleza básica, la perdí cuando nací, el yo de antes no era el yo escencial, estresado, buscando un auto nuevo, queriendo más dinero, admirando la belleza, disfrutando un helado, dando un abrazo y teniendo miedo. Pero ahora estoy aquí, tengo una misión y la tengo clara, tenemos, tiene. Toda esta energía, vidas, muertes somos uno y ayudamos, trabajamos, individuales pero juntos y en paz.
¿Quién me dirige? ¿porqué lo tengo tan claro? ¿Porqué soy yo el que dirige pero no a la vez? Está dentro de mí y yo dentro de él. Dios. Soy una minúscula parte de Él, pero también soy todo Él. No se puede dividir en partes el fuego. Si se junta un cerillo con una hoguera, ¿quién es quién? ¿El cerillo se mezcla en la hoguera o la hoguera en el cerillo?

¿Será así?

Comentarios

  1. No lo se, suena muy esperanzador y al mismo tiempo fuera de cualquier contexto. Se entiende que seguramente todo lo que esta del otro lado, será diferente a lo que conocemos, inclusive la cuestion de los conceptos, la mente, la razon. He de decirte que a la muerte le temo, como a nada, que me he enciclado muchas veces en pensamientos transtornantes y poco enriquecedores, sin fin, una caida libre. Y el hecho de perder todo lo que conozco me lastima y mucho, quizas estoy muy agusto con lo que ha sido la vida. Gracias por compartir esta vida conmigo y los mios.

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